El acoso laboral es una forma de maltrato psicológico asociadas a ciertas circunstancias organizacionales y a hostilidades y conflictos  interpersonales en el contexto de la vida laboral.

Los efectos sobre la persona sometida a ese maltrato son altamente lesivas para su salud mental y física, y afecta al buen funcionamientos de la organización y pone en peligro el clima laboral en la empresa.

Lo más aconsejable es actuar lo más pronto posible para evitar los efectos negativos. Desarrollar protocolos de actuación es una primera medida para activar a los diferentes actores de la organización en la prevención y tratamiento de los casos que se pudieran dar.

Los planes de intervención han de incorporar actuaciones a diferentes niveles: