El trabajo puede convertirse en una oportunidad para desarrollar experiencias de aprendizaje y disfrute de la vida. El engagement es el estado psicológico positivo, relacionado con el trabajo que se caracteriza por vigor, dedicación y absorción (Salanova, 2019).  Estas características están directamente vinculadas a conseguir un estado de alta motivación, energía, y estados psicológicos positivos de entusiasmo, inspiración, orgullo y desafio manteniendo la concentración y el disfrute en el trabajo.

Conseguir el engagement es una tarea que representa tanto un desafio para cada persona como para el conjunto de la organización. El engagement requiere de la persona que esté conectada y oriente su actividad hacia lo que es importante para ella y ponga en juego sus propias fortalezas. Estar bien conectado consigo mismo va a facilitar que pueda aprovechar las oportunidades que la organizació le de para conectarse con las personas, las tareas y necesidades de la organización.

En el otro extremo del engagement tendríamos el burnout (caracterizado por el agotamiento, el estrés y el cinismo); si trabajamos para aumentar el engagement, implícitamente nos alejarémos de la eventualidad del burnout.